Antagonistas de la vitamina K
En este apartado se aborda la función de la vitamina K en la coagulación y se consideran las limitaciones del uso de antagonistas de la vitamina K como anticoagulantes
En este apartado:
Antagonistas de la vitamina K
- La vitamina K es fundamental para la síntesis de varios factores de la cascada de la coagulación: los factores II (protrombina), VII, IX y X, así como la proteína C y la proteína S1.
- Los antagonistas de la vitamina K llevan utilizándose como anticoagulantes desde hace más de 50 años.
- La warfarina, derivado sintético de la cumarina, es el AVK más utilizado1, aunque también se usan otros derivados de la cumarina (fenprocumon y acenocumarol).
Limitaciones de los antagonistas de la vitamina K
- Las limitaciones de los AVK son las siguientes:
- Reducido margen terapéutico
- Interacciones con otros fármacos y alimentos (p. ej., alimentos ricos en vitamina K)
- Retraso en el inicio y cese del efecto anticoagulante (esta es una limitación concreta para la prevención de la tromboembolia venosa, en la que la duración del tratamiento es relativamente corta)
- Necesidad de vigilar frecuentemente la coagulación y ajustar la dosis
- Relación variable entre la dosis y la respuesta de una persona a otra
Vigilancia de los antagonistas de la vitamina K
- Dada la variabilidad entre la dosis y la respuesta de los tratamientos con AVK, es imprescindible vigilar el grado de anticoagulación.
- El tiempo de protrombina (TP) es sensible a los cambios en la protrombina, el factor VII, el factor IX y el factor X. Dada la variabilidad en el reactivo de prueba, la tromboplastina, los laboratorios hematológicos utilizan ahora un índice internacional normalizado (INR) para la medición de la prolongación del TP2.
- El INR proporciona una medida estandarizada del efecto anticoagulante de los AVK y debe mantenerse dentro de un margen a fin de controlar la intensidad de la anticoagulación en pacientes que reciben AVK.
- En la mayoría de los trastornos para los que se recetan los AVK, el margen terapéutico recomendado del INR es de 2,0- 3,0.
- A medida que aumenta el INR se incrementa también el riesgo de hemorragia, que se duplica con cada subida de un punto en el INR.
- Deberá vigilarse el INR del paciente cuando:2
- Se inicie un tratamiento con AVK
- Se cambie la dosis
- Se produzcan cambios en la alimentación o en los medicamentos que se sabe que interactúan con los AVK
- Una vez que se alcance una dosis estable que produzca un nivel de INR terapéutico, deberá repetirse la prueba preferiblemente cada 4 semanas2.
- Los polimorfismos en los genes para el citocromo P450 2C9 (que es el responsable del aclaramiento metabólico de la warfarina) y la epóxido-reductasa de la vitamina K (que recicla la vitamina K) afectan a la farmacodinámica de la warfarina, lo cual contribuye a la variabilidad de la relación dosis-respuesta de una persona a otra3. En la actualidad se está investigado la utilidad clínica del análisis del polimorfismo genético para ofrecer una orientación sobre la posología de los AVK.
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- Haas S. New oral Xa and IIa inhibitors: updates on clinical trial results. J Thromb Thrombolysis 2008;25(1):52–60. Haas S. New oral Xa and IIa inhibitors: updates on clinical trial results. J Thromb Thrombolysis 2008;25(1):52–60. Return to content
- Haines ST, Racine E, Zeolla M. Venous thromboembolism. In Pharmacotherapy: a Pathophysiologic Approach. 5 edn. DiPiro J, Talbert R, Yee G et al. (editors). New York, NY, USA: McGraw-Hill Companies, Inc.; 2002. p. 337–373. Return to content
- Schwarz UI, Ritchie MD, Bradford Y et al. Genetic determinants of response to warfarin during initial anticoagulation. N Engl J Med 2008;358:999–1008. Return to content